Jordi Sánchez Picanyol: El MandaMAS – 3 de Marzo de 2018

Fdo: José Vargas Rincón, Presidente de la ACVOT

El fugado Puigdemont ha elegido para la Presidencia de la Generalitat a un preso preventivo. Hasta aquí lo más normal, dentro de la deriva que llevan los independentistas, en tanto que el ser humano presidente que fue de la ANC, hasta hace unos días, parece tener nuevos anhelos particulares, que no podemos concretar en tanto jamás se ha interesado por las víctimas del terrorismo y no le conocemos, si bien, no dudamos, tiene perfectamente medidas sus conveniencias.

Escribo no sólo como presidente de la “Associació Catalana de Víctimes d’Organitzacions Terroristes”, también como víctima del acto terrorista perpetrado en Hipercor (en Barcelona) el 19 de junio de 1987, por la banda terrorista ETA.

El nombre de una asociación que por aquel tiempo tenia el “honor” y era afín a “Herri Batasuna” y que se llamaba “Crida a la Solidaritat en Defensa de la Llengua, la Cultura i la Nació Catalanes” –tan malos como los de ETA pero, afortunadamente, más cobardes que los que formaban parte de ETA- un dirigente que es un inútil -inscrito como ser humano en el Registro Civil con el nombre de Jordi Sánchez– se permitió justificar la brutal matanza que implicó aquella acción criminal en la que fallecieron 21 personas, entre ellas, 4 niños.

Un inútil que justifica aquellos asesinatos merece todo el desprecio social durante el resto de su vida. Aquí, en Cataluña, dominada por unos insensatos que, en lugar de castigar, premian y jalean a quienes apoyan el crimen y el saltarse las leyes, le van dando cargos al inutil en la Administración Pública o le “colocan” como presidente de una asociación que recibe millonarias subvenciones.

Mañana recibiré llamadas de socios y amigos que me volverán a comentar que, escribiendo artículos como éste, es difícil que la Generalitat de Catalunya subvencione a nuestra asociación de víctimas del terrorismo, a lo que les contestaré lo de siempre –sin reservas-: que si el dinero público que proviene de los tributos que pagamos entre todos y con el que nuestros dirigentes deberían, por mandato legal, respaldar a las víctimas de ETA, lo adjudican arbitrariamente a asociaciones de las que forman parte filoterroristas y en cuya dirección se han integrado miembros terroristas, ya seguiremos asumiendo los costes de atender dignamente a las víctimas del terrorismo otros voluntarios y yo, con o sin el permiso del tiempo que robamos a nuestras familias.

Si una ayuda institucional tiene que venir de quienes apoyan a aquellos que se alinean con los asesinos y subvencionan a esta mala gente, no lo queremos y se lo pueden meter por “La Crida”.