Reflexiones

Tengo la edad y las vivencias que me permiten valorar todo lo que sucede a mi alrededor y, especialmente, en el mundo del terrorismo y su entorno. La misma edad y la desgraciada vivencia que me llevó luchar contra el mismo desde un frente de la lucha antiterrorista privilegiado -desde la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas y no desde la calle como hacen nuestros héroes policiales-. Es una dolorosa contrariedad -para mí- que tal materia sea de mi más íntima y conocedora realidad, pero eso me permite hacer valoraciones del comportamiento de los políticos frente al fenómeno terrorista y compartirlas.

La Guardia Civil ha detenido a nueve personas- miembros de los CDR de Cataluña (los terroristas catalanes), y esta circunstancia -su detención y neutralización- a mí y a miles de millones de ciudadanos en el mundo nos parece algo que celebrar, ya que así se elimina del circuito terrenal a seres de los más horroroso y despreciable.

Algunos, o casi todos los que defienden a estos bobos considerándoles héroes admirables, no tienen la menor idea de lo que están defendiendo. Son el Comité de Defensa del Referéndum primero y de la República después.

A estos, les propongo: ¿Se atreven a venir conmigo a visitar a familias destrozadas por la pérdida de uno de sus miembros -padres, hermanos, hijos- a manos de los terroristas? ¿Se atreven a venir conmigo a dar consuelo a víctimas del terrorismo que han perdido capacidad intelectual, motriz o emocional? Respondo por ellos, pues desde donde yo sé (32 años) nunca han intentado reparar el daño ni pedido perdón. Dirán que “NO”, ya que son terroristas.

Los autores y los que les justifican y defienden en juzgados, periódicos o en las calles, algunas victimas entre ellos, nunca han aparecido sensibilizados por el daño ocasionado en defensa de un ideal diferenciador. Son terroristas.

La única que pidió perdón fue asesinada por Eta, por Kubati siguiendo órdenes de Pakito.

Un iniciado podría pensar que existen dos bandos, un estudioso analista no. Resulta que ha aparecido una nueva figura que de momento califico como la del Excmo. Sr. Ministro de Interior (EMI). Éste anda molesto por no haber sido advertido con anterioridad de la circunstancia de que iba a tener lugar la detención de unos miembros del grupo terrorista CDR que son las siglas de Comité Defensa del Referéndum, después la “R” pasó a ser de República y ahora son Comité Defensa de la República, pero tengo para mí que la “R” se ajusta más a otra cosa y podrían llamarse “Comité en Defensa del Racismo”.

Sr, Ministro le conviene tener más consideración por los héroes que se juegan la vida defendiéndonos y, si Ud. valora que no le conviene, piense que a todos los demás sí.

A los amigos de los CDR

Hace unos días la Guardia civil localizó y detonó un artefacto explosivo de la guerra civil que se hallaba en una playa de Barcelona. Ahora el Servicio de Información de la Guardia Civil -no sé qué haríamos sin ellos- ha localizado y detenido a nueve miembros de los autodenominados CDR, que son unos terroristas que, de momento, gozan de la simpatía de algunos políticos catalanes. Digo de momento porque cuando consigan culminar con éxito alguno de sus objetivos y hagan daño, entonces, lo que ahora es complicidad y hasta simpatía hacia ellos, se convertirá en condena a regañadientes, pues será lo políticamente correcto.

Parece ser que estos del “Comité de Defensa de la República”, estaban preparando diversas acciones criminales para ejecutarlas en el momento en el que se dé a conocer la sentencia del Tribunal Supremo contra los políticos independentistas. Esta respuesta no es nada nuevo, ya la usaba ETA.

El procedimiento está previsto así: Joaquim Torra solivianta al mocerío, los del CDR actúan poniendo las bombas y los beneficios electorales son para el mismo Torra. Como estrategia ya se ha utilizado en España con anterioridad y me viene a la cabeza Javier Arzalluz quien, afortunadamente, ya no puede hacer más daño, pues ha pasado de este mundo a la divina presencia ante la que ya habrá rendido cuentas por sus barbaridades.

Es cuestionable, Sr. Torra, su gusto por unos ideales primarios, sin fundamento sociológico, ni histórico, ni cultural, tanto como lo es el supremacismo de estos del CDR que se consideran más que diferentes: superiores. Se sienten materia de más alto fuste y pretenden reivindicarlo poniendo bombas contra los que consideran sus objetivos: los inferiores, que son todos aquellos que representan ideales que les resultan incómodos. Visto el perfil de los nueve identificados se concluye que tampoco han sido llamados en esta vida para acciones más elevadas que hacer pintadas y poner bombas y, visto lo visto, se diría que Ud. tampoco.

Muchos no logramos entender cómo es posible que, después de lo mucho que hemos sufrido el terrorismo en Cataluña, tengamos gobernantes que consideran a estos potenciales asesinos como, según sus palabras, “ciudadanos comprometidos con su sociedad”. Ahora, va y se apunta a defender a estos CDR que son, por los medios que utilizan y según la ONU – ¿le suena la ONU? – terroristas.

Mire Sr. Torra, se estará de acuerdo o no con sus legítimos anhelos personales e ideológicos, pero lo que es inadmisible, en un responsable político del nivel que se le presume por su cargo, es participar a la ciudadanía su protesta porque los cuerpos policiales desempeñen de forma ejemplar su misión de mantener a la población a salvo de criminales, deteniéndoles y poniéndoles a disposición judicial.

¿Está Ud. loco o qué?

José Vargas

CARTA A QUIENES SE MOLESTAN

Presidir la Asociación Catalana de Víctimas de Organizaciones Terroristas es un honor. Poder ayudar y dar servicio a centenares de personas que, como yo, han sufrido el cruel azote del disparatado y macabro proceder de terroristas primero y quienes les justifican y apoyan después, me genera una inmensa satisfacción. No hay día en que deje de ocuparme en tan delicada como reconfortante dedicación, sin ninguna compensación por ello más allá del reconocimiento y agradecimiento.

En mis años como máximo representante del mayor colectivo de víctimas del terrorismo en Cataluña, he sufrido falta de comprensión, pero también he celebrado muchos éxitos en la labor que me ha sido encomendada y no en buscar la notoriedad que pretenden aquellos cuya única pretensión es la de figurar a toda costa, pues ese es su único objetivo y no alcanzan de otro modo. No han faltado los reconocimientos por el trabajo realizado, lo que me reconforta y estimula para seguir adelante. Para ello, sólo hace falta ponerse a gestionar la manera de dar cobertura a las necesidades de las víctimas como si fueran propias. Eso asegura el mejor servicio, y el éxito en la mayoría de las gestiones me reconforta.

Mi mujer considera que necesito un día con veinticuatro horas más porque así podre dedicarle unas pocas a mi familia. Nada me impide estar siempre al lado de quienes han necesitado que la ACVOT les apoyara, ni el carnicero de Mondragón ni el del Valle de Hebrón.

Acabamos de conmemorar el aniversario del acto terrorista contra el centro comercial Hipercor en Barcelona y todavía está fresco en mi memoria el éxito de la convocatoria. Estoy satisfecho por el apoyo popular por encima de todo, el de políticos e Instituciones y del seguimiento mediático. No es necesario ofender para representar a las víctimas, pero sí una medida dosis de tolerancia hacia quienes no comprenden su importancia y anhelan protagonizar cualquier situación para poder tener protagonismo.

Hace años que en la ACVOT nos libramos de quienes estaban al frente por su ansia de notoriedad y ahora estamos mucho más tranquilos, trabajamos cada día y cuadramos las cuentas. Por eso, cuando determinados iletrados nos critican, sabemos que vamos por el buen camino y a los éxitos en reconocimientos a otras víctimas nos remitimos.

Solo pretendo, como cada año, agradecer la asistencia a todos aquellos ciudadanos que nos acompañaron en los actos conmemorativos -como siempre sea cual sea su motivación y condición- e ignorar a quienes siguen sin comprendernos porque su guerra no es contra el terrorismo y quienes lo justifican, sino contra quienes conseguimos, año a año, llenar de Instituciones y ciudadanía el austero pero estimado acto en recuerdo de todas las víctimas del terrorismo.

Y a quien le moleste: “agua” a poder ser con jabón.

José Vargas

Presidente de ACVOT

El test – Luis Ventoso – ABC – 27/03/2018

Vamos con un imposible. Rajoy se levanta ocurrente y decide tomar una serie de medidas. En primer lugar, presenta un decreto para establecer que el español será la única lengua vehicular en la enseñanza, relegando de facto al vasco, el gallego y el catalán a marías que solo se emplearán en clase de gimnasia, flauta y religión. Además, ya en harina, prohíbe por decreto rotular en catalán los nombres de los comercios, so pena de multa.

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Reflexiones de una víctima ante las excarcelaciones de etarras

RELATO DE UNA VICTIMA
16-Febrero-2018

Las victimas del terrorismo, hace mucho tiempo que reclamamos, Justicia, Dignidad y Memoria, pero nuestras reivindicaciones siempre han caído en saco roto.

Antes de 1995, teníamos que ver con estupor como los asesinos etarras salían tranquilamente de prisión porque no cumplían ni un año por asesinato y nos aguantábamos y nos ninguneaban. Después de 1995 cuando se modificó el código penal para incrementar las penas pasaron de 30 años a 40 íntegros y se dijo sin redención de penas y continuamos igual o peor, porque siguen saliendo sin llegar a cumplir un año por asesinato. Las victimas hemos estado ninguneados por la Justicia en este País.

Este relato se ve agravado desde el momento que el ínclito Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo con la ayuda del juez español López Guerra, derogaron la Doctrina Parot, al menos con esta fórmula los asesinos etarras estarían algunos años más en prisión, por lo que casi un centenar de presos salieron a la calle, lo más llamativo es la actitud del Gobierno español que no esperó ni a la traducción de la sentencia.

Una ofensa más hacia las víctimas y sin parar ni dar cuartel al tiempo, empiezan a salir los etarras enfermos y a este paso tendremos que ser las victimas las que ocupamos el lugar en las prisiones.

Como víctima del atentado de Hipercor, es Indignante y bochornoso que dos de los terroristas de aquel horrible atentado ya están en la calle y el año que viene los otros dos “Santi Potros” y Caride Simón, estarán en la calle si no los ponen antes por descontarles días por redención de la pena y al ritmo que van antes de final de este año estarán tomando potes o pintxos por cualquier bar del País Vasco.

A mi particularmente me da igual donde cumplan las condenas mientras estén encerrados el mayor tiempo posible o que se pudran en prisión y así sus familiares no tendrán que hacer muchos kilómetros para verlos y no tendrán que sufrir mucho.

Alguien ha pensado en el sufrimiento de las familias de las victimas que nunca más podrán ver a sus seres queridos, nadie se acuerda de todas ellas a las que les han asesinado un familiar, no le importaría tener el cementerio cerca o lejos, cualquiera de ellos preferiría tenerlo a mucha distancia pero poder decirle a un hijo, un padre, un hermano o un familiar TE QUIERO.

Reflexiones de una víctima ante las excarcelaciones de etarras – 17 de Febrero de 2018

El Independiente – José Vargas – 17/02/2018

Las victimas del terrorismo, hace mucho tiempo que reclamamos, Justicia, Dignidad y Memoria, pero nuestras reivindicaciones siempre han caído en saco roto.
Antes de 1995, teníamos que ver con estupor como los asesinos etarras salían tranquilamente de prisión porque no cumplían ni un año por asesinato y nos aguantábamos y nos ninguneaban.

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Pablo, el infierno mismo – Santiago Abascal | Verdades que ofenden…

«No he de callar por más que con el dedo, ya tocando la boca o ya la frente, silencio avises o amenaces miedo. ¿No ha de haber un espíritu valiente? Siempre se ha de sentir lo que se dice? ¿Nunca se ha de decir lo que se siente? Hoy, sin miedo que, libre, escandalice, puede […]

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Los «méritos» de Urrusolo

La Razón –  José Vargas – 29 de febrero de 2016.

Una vez más, las víctimas del terrorismo padecemos la humillación. No discuto que este asesino etarra haya cumplido –o no– con su deuda penal, porque no me corresponde el análisis, es competencia de la Administración de Justicia. Hay mucho pesar entre las víctimas del terrorismo y habrá muchas recaídas psicológicas.

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