Carta abierta, de Silvia Vidal – 21 de Junio de 2017

Últimamente, con motivo de los diferentes actos de homenaje a las Víctimas de  Hipercor y a todas las víctimas del terrorismo, he leído y escuchado comentarios, muchos comentarios, calificando a las víctimas ya sus representantes como «fachas». Estos comentarios son tanto insultantes como absurdos, y sólo responden a la ignorancia de aquellos que no tienen ni la más mínima idea de que hablan.
De verdad alguien con dos dedos de cordura puede avalar esta afirmación? Sabéis cuántas víctimas de terrorismo ha habido en España? Es normal calificar a todos igual?
Es cierto que las víctimas durante un tiempo somos muy vulnerables y fáciles de manipular. No puedo negarlo. Pero tenemos ideas e ideales propios. Todos. Cada uno tiene la suya. Y unos a otros ni siquiera nos las preguntamos. Lo que nos une va mucho más allá de nuestras ideas políticas. Nos une querer preservar la dignidad de tantos hombres, mujeres y niños que perdieron la vida o sufrieron las consecuencias de la barbaridad.
La función de las diferentes asociaciones de víctimas es obligar a las Administraciones a trabajar para un futuro que proporcione seguridad.
Si. Es cierto que algunos políticos intentan aprovecharse de las víctimas, somos un activo importante para muchos. Pero las víctimas sabemos distinguir muy bien quienes son. Quizás sí que a algunas asociaciones ya les está bien. Pero no a todas.
Puedo dar fe de que a la Asociación Catalana quienes estamos, somos plurales. A mí nunca nadie me ha preguntado mis preferencias políticas. Si a alguien le interesan sólo tiene que dar un vistazo a mi perfil de facebook y, entre chistes, gatitos y vídeos de bebés que nos arrancan una sonrisa, también muestro abiertamente que me gusta y quién no.
Y como afectada por el terrorismo, reclamo mi derecho a que cuatro descerebrados no me juzguen ni me califiquen de nada por el hecho de que, un día hace 37 años, unos asesinos mataron a mi hermano.